1- Activos hidratantes: Ingredientes activos muy nutritivos. Intenta utilizar los más completos que cumplan varias funciones como: proteger, reparar e hidratar. ¿Lo último? El ácido hialurónico
2- Protección solar: Los labios también se queman, para evitar que aparezcan lesiones solares, utiliza productos con un SPF suficiente.
3- Exfólialos: Con productos indicados para ello. No frotes con las cerdas de un cepillo, ya que levantan la piel e irritan el tejido labial.
4- Cuídalos a tiempo: No esperes a que se agrieten o sangren, pero si no lo has hecho, utiliza un bálsamo reparador cuanto antes.
5- Que estén presentes en tu ritual: El uso de productos protectores durante el día y la regeneradores durante la noche